Sequía

Nuestra provincia registró niveles de lluvias muy pobres durante la primera parte de octubre, según se detalló desde la Bolsa de Cereales entrerriana.

La producción del ciclo 2022-2023 se ubicó como la tercera más baja de los últimos 23 años. La sequía provocada por el efecto "La Niña" tuvo un impacto significativo.

Sequía y altos costos dificultan la salida de la producción de citrus, frente a países más competitivos, que avanzan en variedades y calidad.

Como consecuencia de la histórica sequía que afectó al país durante gran parte del año pasado y principios de 2023, la cosecha de maíz finalizó a nivel nacional con una caída del 34,6% respecto al ciclo anterior.

Habían sido alimentadas con rollo de avena al que le faltó suficiente oreo previo, explicó un veterinario.

El gobierno quitó el IVA al agua mineral y anunció la construcción de una represa provisoria.

El informe climático emitido por la Bolsa de Cereales, establece que, debido a las últimas lluvias junto a las condiciones climáticas, se favoreció la acumulación de reservas hídricas en casi toda la provincia.

Geógrafo especializado explicó que nuestro país mostró aumentos significativos en la temperatura en los últimos 20 años.

El origen de esta gran pérdida se debe a la mineralización del suelo que produjo la sequía y que absorben las pasturas.

La Cámara de la Industria Aceitera y el Centro Exportador de Cereales informó que fenómenos como la falta de lluvias y el fenómeno de La Niña repercutieron para que haya escasez de divisas.

En el primer trimestre del año, el país trajo 2252 toneladas del producto; mientras que en todo 2022 habían ingresado 2799 toneladas sumado entre todos los cítricos.