La llegada de Milei a Paraná reflejó la polarización del país, tras la suspensión de un acto en Santa Fe

La visita del presidente Javier Milei a Paraná generó este sábado un clima de fuerte tensión en la costanera baja de la capital entrerriana, donde se desplegó un importante operativo de seguridad ante las manifestaciones simultáneas a favor y en contra del mandatario.

Desde temprano, simpatizantes de La Libertad Avanza se concentraron con banderas celestes y blancas para recibir al presidente, mientras que organizaciones sociales y militantes opositores se movilizaron con pancartas y cánticos en rechazo a las políticas económicas del Gobierno nacional.

La Policía de Entre Ríos implementó un operativo preventivo con patrulleros, motos, caballos y personal de Infantería, además de un cordón sobre avenida Laurencena y calle Acuerdo de San Nicolás para evitar enfrentamientos directos. El tránsito en la zona costera fue restringido y los vehículos derivados hacia calles aledañas.

A pesar de algunos forcejeos y corridas entre manifestantes opositores y las fuerzas de seguridad, no se registraron incidentes graves. El ambiente se mantuvo bajo estrictos controles y una alta presencia de efectivos, reflejando la fuerte polarización social y política que atraviesa el país.

La llegada de Milei a Paraná se produce tras la suspensión de un acto en Santa Fe por disturbios, lo que motivó un refuerzo adicional en las medidas de seguridad. Finalmente, la actividad oficial pudo desarrollarse en medio de cánticos de apoyo y protestas críticas, con una tensión contenida que marcó la jornada.