Desidia: sin aulas ni respuestas, suspenden clases por riesgo edilicio en la Escuela 55

Con aulas clausuradas, techos que se llueven, filtraciones, riesgo eléctrico y un sótano inhabilitado por inundaciones, la comunidad educativa de la Escuela Primaria N° 55 “Justo José de Urquiza” se moviliza este martes para exigir respuestas.

La comunidad educativa de la Escuela Primaria N° 55 “Justo José de Urquiza”, ubicada en calle San Martín al 300 de Concordia, convocó a una manifestación este martes a las 10:00 frente a la Dirección Departamental de Escuelas. Reclaman obras urgentes de infraestructura en el edificio, que se encuentra en estado crítico.

La directora del establecimiento, Julieta Degani, explicó que la medida fue consensuada en una asamblea con padres y docentes, como parte de un plan de visibilización de la problemática. “Hay un aula clausurada por filtraciones en el techo, techos que se llueven, humedad en paredes, pisos con hundimientos, baños rotos, instalaciones eléctricas deterioradas y un sótano inhabilitado desde hace años por constantes inundaciones”, detalló.

En este contexto, para resguardar la salud y seguridad de los alumnos, se implementó una rotación semanal de clases virtuales: un grado por semana queda sin presencialidad debido a la falta de aulas. La situación afecta a unos 15 estudiantes por turno.

La semana pasada, personal de mantenimiento de la Departamental desagotó el sótano, pero las lluvias del fin de semana volvieron a anegarlo. “El comedor y otras áreas quedan a oscuras cuando se corta la luz por la humedad. Las filtraciones son constantes y no hay novedades sobre reparaciones concretas”, agregó Degani.

La directora mencionó que el establecimiento está incluido dentro del presupuesto de CAFESG, pero solo recibieron un informe técnico preliminar de dos hojas, sin firma ni número de expediente. “No hay fecha de inicio de obras ni compromiso concreto”, afirmó.

A pesar de la visita de autoridades como el director departamental Julio Barrios y supervisores de nivel, las respuestas han sido vagas. Padres y docentes consideran que la situación edilicia representa un riesgo para la salud de los niños. Por eso, acompañarán la movilización aunque llueva.

“El reclamo es por un lugar digno, seguro y saludable para nuestros hijos”, enfatizó Degani. Mientras tanto, las reuniones semanales con familias continuarán y no se descartan nuevas medidas si no hay avances.